“las fotografías analógicas tienden a significar fenómenos, las digitales, conceptos”.
Fontcuberta explora cómo la revolución tecnológica ha generado, definitivamente, otro modo de ver y de ser, cómo la fotografía actual o la posfotografía ambiciona no tanto documentar como sí enviar un mensaje: Esta cámara posmoderna o “cámara de Pandora” ya no registra el mundo, sino que tiene la intención y capacidad de construirlo.